ALFONSO SÁENZ  |  Madrid, 16/02/2010

Para el paseante siempre es deleitosa una paradita en la Plaza Mayor de Madrid. Admirar las arcadas y pináculos de este monumento es todo un espectáculo. Si, además, en el centro de la plaza se yergue un piano en posición vertical y sobre un andamio de seis metros de altura, el espectáculo no tiene precio. Esta es la propuesta de DAVID MORENO SASTRE, quien, con su función 'Floten Tecles', logró reunir a cientos de curiosos paseantes en la gélida noche del pasado sábado, 13 de febrero.

'Floten Tecles' es un espectáculo teatral y musical donde David Moreno toca el piano, las percusiones y canta en las alturas, colgado sobre su piano. La tapa del piano se transforma en una pantalla de cine donde se proyecta un mediometraje lleno de humor y colorido. Emulando a los pianistas del clásico cine mudo, el músico va construyendo en directo la banda sonora de la película, a la vez que interactúa de manera constante con los personajes y con las imágenes que aparecen en ella. Resulta difícil de creer cómo este artista logra sincronizar con tanta precisión y estilo la música en directo con las imágenes en movimiento.

Me pregunto en qué momento se encendería la bombilla de la creatividad en la mente de este catalán de 37 años. ¿Un espectáculo músico-teatral-cinematográfico montado alrededor de un piano colgado verticalmente a 6 metros de altura? ¿Qué pensaron sus amigos o su familia cuando les explicó su proyecto? ¿Lo tomarían por loco? Pues, señores, el loco consiguió que una multitud aplaudiera cada una de sus piezas con fervor y nerviosismo; un nerviosismo muy favorecido por la temperatura bajo cero de la capital, que obligaba a los seres congregados a apretujarse los unos con los otros. Factor éste muy recomendable para estas inclementes fechas.

Desde mi oscuro rincón siempre aplaudiré esta clase de iniciativas. Si quiero tocar mi piano vertical sobre un andamio, ¿quién me lo va a impedir? Ante la cada vez más preocupante carencia de escenarios, este pianista ha cortado por lo sano. Ahora su escenario es el cielo, y de eso no falta.