Texto: Eduardo Izquierdo


Jaime Anglada: "Si no hago rock ¿qué narices hago?"

Jaime Anglada acaba de publicar un discazo titulado "Otra canción de carretera" que reúne todos los clichés de un buen disco de rock de factoría americana excepto el idioma. Quizá eso ha provocado una duda a la hora de colocar a Jaime en el saco del rock o el saco de los cantautores. Pero por encima de todo están las canciones. Anglada es un gran escritor de canciones, un contador de historias, lo que los americanos llaman un songwriter, cada vez más cercano a sus admirados Dylan o Springsteen, tanto por su madurez como por su coherencia artística. Por eso queríamos hablar con él, para que nos contara sus impresiones sobre el nuevo disco, como había sido recibido y qué opina del roc en general. Anglada es un tío encantador, carismático sobre el escenario y también debajo de él accedió a que lo "atracáramos" minutos antes de un concierto promocional de "Otra canción de carretera" y esto fue lo que nos dijo.

- Háblame un poco del disco y las diferencias con tu anterior trabajo, "Nunca tendremos Graceland"

- Bueno, mis discos han evolucionado de un disco de un chaval de 20 años y las cosas que dices a esa edad a algo más maduro. "Graceland" fue el primer disco que yo produje, que no era en una multinacional como Virgin anteriormente...La verdad es que cuando lo hice pensé que tenía el sonido que yo quería encontrar con mi voz muy presente, las guitarras acústicas muy presentes...Cuando lo acabé pensé en hacer un disco totalmente diferente y pensé "no, ahora que he encontrado un sonido lo que debo ahcer es acabarlo de perfilar", por lo que podríamos decir que sí que es una continuación de lo empezado con el disco anterior. El sonido es muy limpio y me gusta. No está superproducido. Al llegar al estudio pensaba "esto es un disco como los que hace Van Morrison". Lo que hay y punto.

- ¿Qué te ha influido más al hacer las canciones? ¿Son todas nuevas o hay algún descarte del disco anterior?

- Las diez canciones de este disco son nuevas. Son letras muy sencillas. Cuando me metí en el estudio, empecé una pequeña maqueta y descansé una semana. Después hice 10 canciones nuevas que son las que al final han salido. Las canciones hablan de nuestra vida con la guitarra dando vueltas por ahí.

- ¿Cómo haces las canciones?

- Algo muy sencillo. Voy con un bolígrafo y una libreta apuntando frases. Nunca me suelen salir canciones del tirón excepto "Enanito burlón" que sí que la escribí mientras esperaba a Toni Pastor en el estudio.

- ¿Siempre dices lo que quieres en tus canciones?

- Bueno al final siempre acaba todo en que son nuestras canciones. Yo no empleo libros de rimas, estilo o cualquier cosa. Todo es muy emocional. A mi me gusta tocar y hacer canciones. Me da da igual si son buenas o malas. Son mis canciones y punto. Hay algunas más sencillas y otras no tanto, pero todas salen del alma. Cómo curiosidad te diré que el productor de mi segundo disco me preguntaba si era español porque en ninguna de mis canciones aparecía la palabra corazón. Y es cierto hasta este disco no había aparecido esa palabra en mis letras. Él siempre me decía que las canciones tenían una estructura pero yo no puedo hacerlo. Estoy muy influenciado por el más grande que es Bob Dylan. Su manera de hacer las canciones no sigue ningún estereotipo. No me gusta imitarlos, pero la influencia existe de él, de Springsteen, de Neil Young...

- ¿Qué me dices si te digo eso que tanto habrás oido de "Jaime Anglada no hace rock"?

- Entonces ¿qué narices hago? Eso es porque no nos han visto en directo. Nuestra banda es muy potente, casi punks podríamos decir. Somos muy rockeros. A mi me gustan los Clash, los Who...el rock más clásico. Lo que pasa es que los discos no se pueden tocar como en directo porque los discos son para toda la vida.

- ¿Y un disco en directo te lo has planteado?

- No, porque considero que un disco en directo es el resultado de toda una carrera consolidada. La verdad es que todavía no me lo he planteado.

- ¿Qué opinas de la música americana nueva que está surgiendo?

- Me encantan los Jayhawks y Ryan Adams me parece un genio. Él tiene una actitud rockera, casi punk. Yo lo vi en directo y fue uno de los conciertos de mi vida porque tocara lo que tocara sonaba fantástico, ya fuera solo o con el grupo. Parecía que estaban ensayando y sonaban de fábula. El tío ha hecho cuatro discos en un año y son una maravilla. Ahora estoy contento porque parece que todo resurge y se nombra, gracias a la película que se ha hecho sobre su vida a Johnny Cash. He de confesar que lloré viendo a Joaquin Phoenix haciendo de Cash cantando "I walk the line" (Jaime tararea el tema).

- ¿Te has planteado alguna vez dejarlo?

- No, nunca. Cuando la gente habla de la crisis del negocio discográfico lo tengo muy claro. Están recogiendo lo que ellos mismos han sembrado. Yo no he de rendir cuentas a nadie. Sólo tengo mis canciones y para dejarlo tendré que tener una crisis emocional. Lo que más me gusta en este mundo es cantar con una copa de vino en la mano. Es mi trabajo cuantos más conciertos hago mejor me va para pagar el alquiler. Eso sí, estoy dentro del juego. Se que está jodido pero mis armas en esta guerra son mis canciones, mi guitarra y mi voz. Yo no busco la fama, si llega, fantástico pero hay cosas que te llegan más que eso.

- ¿Crees en la inspiración?

- Yo no. Picasso que es uno de mis grandes ídolos decía que la inspiración tenía que pillarte trabajando si venía. Yo creo en la motivación.

Dejamos que Jaime se vaya para empezar su concierto (una fantástica muestra de lo que es capaz sobre un escenario) deseándole suerte y quedándonos con la idea de que acabamos de hablar con un músico íntegro. Ni más ni menos.